No es fácil presentar a Santos Urías porque es un hombre polifacético y que vive con pasión los distintos ámbitos de su vida. Por ello, se entrega en todos y cada uno nos ofrece una perspectiva de su interesante personalidad.
Licenciado en Derecho, escritor, músico y sacerdote diocesano desde hace más de veinte años. Es el sacerdote de la parroquia de San Millán y San Cayetano en el barrio de Lavapiés. Trabaja en diversos ámbitos que combinan lo pastoral y lo social: jóvenes, centro de escucha, educación de calle, interculturalidad, espacios para la contemplación. También colabora en proyectos artísticos propiciando el encuentro desde diferentes lenguajes.
- ¿Qué te gustaría que tus lectores descubrieran en la lectura de este
libro?
Es un libro sencillo que busca sobretodo compartir experiencias de vida.
Algunos lectores me han dicho que les ha acompañado de una manera especial
durante su lectura. Con esto yo me siento muy agradecido.
- ¿Qué te ha aportado el proceso de creación y la publicación de este
libro?
Ha sido un proceso muy bonito de reflexión, de búsqueda. De compilar
momentos, rostros, situaciones. El silencio, como digo en una parte del libro,
no hay que buscarlo hay que dejarse encontrar por él. Yo lo he encontrado de
alguna forma con este libro. Cada página tiene un poquito de vida.
- ¿A qué sabe el silencio?
El silencio tiene un sabor dulce, amargo, salado, picante… El silencio se
mimetiza y te devuelve el sabor de lo que haces, de lo que compartes, de lo
eres, de lo que sientes. Saborear el silencio es gustar y paladear cada momento
a la luz del Espíritu.
- Tres consejos a los lectores de tu libro
Soy malo en esto de aconsejar pero bueno:
Leerlo despacito, sin prisa, con mirada contemplativa.
Dejar que estas páginas puedan tener un eco en el propio silencio personal.
Que cada cual y cada quién
escriba sus páginas. Esas son las que más merecen la pena
EDICIONES KHAF
Xaudaró 25, 28034
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